Bueno, aca subo unas imágenes con sus correspondientes descripciones, que me parecen bastante interesantes... A veces cuando uno estudia sobre la ciudad de Buenos Aires, naturaliza tanto todo lo que hay a nuestro alrededor, que pareciera que siempre estuvo ahí y que nada cambió. Como nada de esto fue asi, ni lo seguira siendo, aprovecho para compartir estas imagenes que nos recuerdan lo que Buenos Aires fue hace no mucho tiempo atrás...
El muelle de pasajeros avanzaba sobre el barroso lecho del río para que los viajeros descendiesen directamente de los barcos. Fue un modesto, pero útil y pintoresco antecedente de los muelles futuros. Las valijas y baúles eran transportadas en un vehículo que corría sobre rieles. Las construcciones gemelas que flanqueaban la entrada al muelle, fueron proyectadas por Prilidiano Pueyrredón. Observando esta fotografía, obtenida alrededor del año 1880, se piensa en una Buenos Aires sosegada y adormilada... grave error, era todo lo contrario. Surge del censo de 1887, que en la ciudad vivían 164.767 argentinos y 148.615 extranjeros.
Imagen: postal editada por la libreria Mitchell´s, calle Cangallo 578/80.
El fotógrafo captó esta imagen desde el viejo muelle de pasajeros. A la izquierda la Aduana semicircular, construida en 1856, es el único edificio que avanzaba sobre el río; en el centro la Casa de Gobierno aún en construcción y a la derecha el edificio de la Estación Central. Éste, diseñado originalmente para la ciudad de Madrás en la India, cambió de destino para inaugurarse en Buenos Aires; fue destruido por un incendio en el año 1897. Hasta ese momento Puerto Madero era un anhelo, que poco tiempo después se concretó.
La fotografía data aproximadamente del año 1883.
La costa de Buenos Aires, hacia el sur, tomada aproximadamente a la altura de las calles Balcarce y Alsina. El río llegaba casi a sobrepasar la Avenida Paseo Colón. El edificio que se destaca en el horizonte es la Iglesia de San Telmo y da la altura y la escala de los edificios del Barrio Sur. Se hace difícil relacionar esta imagen con Puerto Madero donde las lavanderas lavaban y tendían la ropa aprovechando las depresiones de las toscas. Años más tarde se construyeron allí los diques y galpones.
Fotografía de alrededor del año 1883.
Los carruajes y el tranvía a caballos circulan por la calle Balcarce, mientras que desde la calle Victoria, hoy Hipólito Yrigoyen, se ve el río que entonces llegaba casi hasta Paseo Colón. A la derecha, el edficio de Rentas Nacionales y a la izquierda el de Correos, más tarde integrado a la Casa de Gobierno. Puerto Madero es aún una obra a emprender, que avanzará ganando espacios al Río de la Plata. Buenos Aires, comparativamente, es aún una ciudad relativamente tranquila.
Fotografía alrededor del año 1885.
La imagen muestra la entrada del Dique Nº1 de Puerto Madero. Al fondo se percibe el perfil de la ciudad. A comienzos del Siglo XX el Puerto, en todas sus actividades, se había transformado en un símbolo de progreso; no casualmente fue un tema ineludible para postales.
En aquellos años, este sistema postal se había en un medio de comunicación masivo, a tal punto, que existían coleccionistas de postales.
Tarjeta postal sobre una fotografía de E.C. Moody, editada por R. Rosauer. Año 1904.
Los depósitos de la Aduana, impecable arquitectura de la Revolución Industrial para un país que crecía, se prestaban a la perfección a su destino. El Puerto hervía de actividad, los carros llegaban y colocándose debajo de los guinches descargaban lo que llegaba del Viejo Mundo o cargaban los productos del país que cruzarían luego el Atlántico.
Tarjeta postal coloreada a mano. Alrededor del año 1905.
A pesar de estar en los comienzos del Siglo XX, la navegación a vela era aún vigente; la imagen es elocuente, los mástiles recrean el bosque de donde se cortaron loa árboles para fabricarlos. A vela o a vapor, todos los barcos llegaban al Puerto de Buenos Aires, y allí esperaban los carros para descargar y cargar. La Boca del Riachuelo reunía a los integrantes de distintas colectividades.
Imagen alrededor del año 1905.
No es fácil imaginar el tumultuoso movimiento del puerto porteño, ¿sería un disparate compararlo con el tránsito de la Avenida 9 de Julio? Probablemente no. Muchas eran embarcaciones, no pocas llevadas por remolcadores, que se movilizaban ágilmente entre los barcos. La imagen es expresiva de por sí.
Tarjeta postal coloreada a mano. Alrededor del año 1905.
Visión en perspectiva de la Dársena Sud. La cantidad de embarcaciones certifica la actividad del novísimo Puerto de la Ciudad que pomposamente llamaban “La Gran Capital del Sud”. En esta tarjeta postal vale detenerse en las construcciones que se ven a la derecha: como algunas casas de La Boca, han sido construidas en madera, pero respetando las líneas arquitectónicas de la época. La galería en planta baja es balcón del primer piso y son también de madera las terminaciones superiores, salvo el techo que es de chapa.
Mercado Central de Frutos. Fue este uno de los ejemplos más imponente de Arquitectura Industrial que pudo verse junto al Riachuelo. Su enorme superficie cubierta, de 59.270 m2, dan idea de lo que allí podía almacenarse. Los diferentes espacios internos daban lugar a un galpón para locomotoras, calles para ferrocarriles y carros, espacio para almacenar grasa, etc. Su interminable fachada de ladrillo, coronada por una mansarda, fue imagen familiar para los cientos de laborantes que en él trabajaban y que jamás habrán pensado ajena una presencia arquitectónica absolutamente europea.
Tarjeta postal, coloreada a mano, de alrededor del año 1905.
Los terrenos ganados al río para concretar el Puerto de la Ciudad generaron un espacio entre las avenidas Paseo de Julio y Pase Colón y los galpones de la Aduana. Éste espacio se parquizó según diseño inconfundiblemente francés. La terraza que se ve en primer plano es actualmente la Plaza de Mayo, frente a la Casa de Gobierno.
Tarjeta postal, coloreada a mano, de alrededor del año 1908.
Vista de la actual Avenida Leandro N. Alem obtenida desde la Casa de Gobierno, alrededor del año 1910. Una ancha plazoleta arbolada la partía en dos. Los edificios de la recova tenían una franca vista sobre el río, a lo suma apenas cortada por los galpones de la Aduana. Prácticamente no existían construcciones en la franja vecina al río.
Tarjeta postal, coloreada a mano, editada por Carmelo Ibarra, circa 1908.
Ritmo de actividad en la Dársena Sud, barcos a vela y otros que las utilizan, además del vapor. Sobre el borde del muelle corren los guinches sobre rieles; a su derecha los galpones con techo de chapa. Un carro parece retirarse ya cargado, mientras varios jornaleros esperan que se les ofrezca trabajo.
Tarjeta postal, coloreada a mano, editada por Z. Fumagalli, año 1912.
Vista parcial de la ciudad tomada desde el Puerto, el sector elegido corresponde a la Plaza San Martín y sus alrededores, el edificio que se destaca a la izquierda es el Plaza Hotel y el ubicado al centro, con una cúpula, es el Pabellón Argentino que estuvo en la Exposición Internacional de París en 1889. Desarmado y rearmado aquí sobre la prolongación de la calle Arenales frente a la Plaza, en su interior se instaló el Museo Nacional de Bellas Artes. Fue demolido en 1932.
Tarjeta postal de Z. Fumagalli y Cia. Alrededor de los años 1910-1915.
El Puerto de Buenos Aires fue tema de postales en donde las dársenas, los galpones de la Aduana y las embarcaciones testimoniaban la importancia de este nuevo y estratégico lugar de la ciudad, ya indiscutible puerta de entrada para todos los que llegaban por el río. Era un espacio que se acotaba convirtiéndose, además, en artístico escenario para fotógrafos, como lo prueba este atardecer que tiene por fondo un diferente enfoque de Plaza San Martín y Retiro.
Tarjeta postal, alrededor del año 1918.
El muelle de pasajeros avanzaba sobre el barroso lecho del río para que los viajeros descendiesen directamente de los barcos. Fue un modesto, pero útil y pintoresco antecedente de los muelles futuros. Las valijas y baúles eran transportadas en un vehículo que corría sobre rieles. Las construcciones gemelas que flanqueaban la entrada al muelle, fueron proyectadas por Prilidiano Pueyrredón. Observando esta fotografía, obtenida alrededor del año 1880, se piensa en una Buenos Aires sosegada y adormilada... grave error, era todo lo contrario. Surge del censo de 1887, que en la ciudad vivían 164.767 argentinos y 148.615 extranjeros.Imagen: postal editada por la libreria Mitchell´s, calle Cangallo 578/80.
El fotógrafo captó esta imagen desde el viejo muelle de pasajeros. A la izquierda la Aduana semicircular, construida en 1856, es el único edificio que avanzaba sobre el río; en el centro la Casa de Gobierno aún en construcción y a la derecha el edificio de la Estación Central. Éste, diseñado originalmente para la ciudad de Madrás en la India, cambió de destino para inaugurarse en Buenos Aires; fue destruido por un incendio en el año 1897. Hasta ese momento Puerto Madero era un anhelo, que poco tiempo después se concretó.La fotografía data aproximadamente del año 1883.
La costa de Buenos Aires, hacia el sur, tomada aproximadamente a la altura de las calles Balcarce y Alsina. El río llegaba casi a sobrepasar la Avenida Paseo Colón. El edificio que se destaca en el horizonte es la Iglesia de San Telmo y da la altura y la escala de los edificios del Barrio Sur. Se hace difícil relacionar esta imagen con Puerto Madero donde las lavanderas lavaban y tendían la ropa aprovechando las depresiones de las toscas. Años más tarde se construyeron allí los diques y galpones.Fotografía de alrededor del año 1883.
Los carruajes y el tranvía a caballos circulan por la calle Balcarce, mientras que desde la calle Victoria, hoy Hipólito Yrigoyen, se ve el río que entonces llegaba casi hasta Paseo Colón. A la derecha, el edficio de Rentas Nacionales y a la izquierda el de Correos, más tarde integrado a la Casa de Gobierno. Puerto Madero es aún una obra a emprender, que avanzará ganando espacios al Río de la Plata. Buenos Aires, comparativamente, es aún una ciudad relativamente tranquila.Fotografía alrededor del año 1885.
La imagen muestra la entrada del Dique Nº1 de Puerto Madero. Al fondo se percibe el perfil de la ciudad. A comienzos del Siglo XX el Puerto, en todas sus actividades, se había transformado en un símbolo de progreso; no casualmente fue un tema ineludible para postales.En aquellos años, este sistema postal se había en un medio de comunicación masivo, a tal punto, que existían coleccionistas de postales.
Tarjeta postal sobre una fotografía de E.C. Moody, editada por R. Rosauer. Año 1904.
Los depósitos de la Aduana, impecable arquitectura de la Revolución Industrial para un país que crecía, se prestaban a la perfección a su destino. El Puerto hervía de actividad, los carros llegaban y colocándose debajo de los guinches descargaban lo que llegaba del Viejo Mundo o cargaban los productos del país que cruzarían luego el Atlántico.Tarjeta postal coloreada a mano. Alrededor del año 1905.
A pesar de estar en los comienzos del Siglo XX, la navegación a vela era aún vigente; la imagen es elocuente, los mástiles recrean el bosque de donde se cortaron loa árboles para fabricarlos. A vela o a vapor, todos los barcos llegaban al Puerto de Buenos Aires, y allí esperaban los carros para descargar y cargar. La Boca del Riachuelo reunía a los integrantes de distintas colectividades.Imagen alrededor del año 1905.
No es fácil imaginar el tumultuoso movimiento del puerto porteño, ¿sería un disparate compararlo con el tránsito de la Avenida 9 de Julio? Probablemente no. Muchas eran embarcaciones, no pocas llevadas por remolcadores, que se movilizaban ágilmente entre los barcos. La imagen es expresiva de por sí.Tarjeta postal coloreada a mano. Alrededor del año 1905.
Visión en perspectiva de la Dársena Sud. La cantidad de embarcaciones certifica la actividad del novísimo Puerto de la Ciudad que pomposamente llamaban “La Gran Capital del Sud”. En esta tarjeta postal vale detenerse en las construcciones que se ven a la derecha: como algunas casas de La Boca, han sido construidas en madera, pero respetando las líneas arquitectónicas de la época. La galería en planta baja es balcón del primer piso y son también de madera las terminaciones superiores, salvo el techo que es de chapa. Postal coloreada a mano, alrededor del año 1905.
Mercado Central de Frutos. Fue este uno de los ejemplos más imponente de Arquitectura Industrial que pudo verse junto al Riachuelo. Su enorme superficie cubierta, de 59.270 m2, dan idea de lo que allí podía almacenarse. Los diferentes espacios internos daban lugar a un galpón para locomotoras, calles para ferrocarriles y carros, espacio para almacenar grasa, etc. Su interminable fachada de ladrillo, coronada por una mansarda, fue imagen familiar para los cientos de laborantes que en él trabajaban y que jamás habrán pensado ajena una presencia arquitectónica absolutamente europea.Tarjeta postal, coloreada a mano, de alrededor del año 1905.
Los terrenos ganados al río para concretar el Puerto de la Ciudad generaron un espacio entre las avenidas Paseo de Julio y Pase Colón y los galpones de la Aduana. Éste espacio se parquizó según diseño inconfundiblemente francés. La terraza que se ve en primer plano es actualmente la Plaza de Mayo, frente a la Casa de Gobierno.Tarjeta postal, coloreada a mano, de alrededor del año 1908.
Vista de la actual Avenida Leandro N. Alem obtenida desde la Casa de Gobierno, alrededor del año 1910. Una ancha plazoleta arbolada la partía en dos. Los edificios de la recova tenían una franca vista sobre el río, a lo suma apenas cortada por los galpones de la Aduana. Prácticamente no existían construcciones en la franja vecina al río.Tarjeta postal, coloreada a mano, editada por Carmelo Ibarra, circa 1908.
Ritmo de actividad en la Dársena Sud, barcos a vela y otros que las utilizan, además del vapor. Sobre el borde del muelle corren los guinches sobre rieles; a su derecha los galpones con techo de chapa. Un carro parece retirarse ya cargado, mientras varios jornaleros esperan que se les ofrezca trabajo.Tarjeta postal, coloreada a mano, editada por Z. Fumagalli, año 1912.
Vista parcial de la ciudad tomada desde el Puerto, el sector elegido corresponde a la Plaza San Martín y sus alrededores, el edificio que se destaca a la izquierda es el Plaza Hotel y el ubicado al centro, con una cúpula, es el Pabellón Argentino que estuvo en la Exposición Internacional de París en 1889. Desarmado y rearmado aquí sobre la prolongación de la calle Arenales frente a la Plaza, en su interior se instaló el Museo Nacional de Bellas Artes. Fue demolido en 1932.Tarjeta postal de Z. Fumagalli y Cia. Alrededor de los años 1910-1915.
No pocos porteños, en los primeros años del Puerto, consideraban a los silos y molinos harineros “horrorosos barracones”; así definidos por la revista de la Sociedad Central de Arquitectos en 1904. Aún no habían sido comprendidos en su exacta valoración.
Tarjeta postal de Z. Fumagalli y Cia. Alrededor de los años 1918.
Tarjeta postal de Z. Fumagalli y Cia. Alrededor de los años 1918.
El Puerto de Buenos Aires fue tema de postales en donde las dársenas, los galpones de la Aduana y las embarcaciones testimoniaban la importancia de este nuevo y estratégico lugar de la ciudad, ya indiscutible puerta de entrada para todos los que llegaban por el río. Era un espacio que se acotaba convirtiéndose, además, en artístico escenario para fotógrafos, como lo prueba este atardecer que tiene por fondo un diferente enfoque de Plaza San Martín y Retiro.Tarjeta postal, alrededor del año 1918.
Extraido de "Aquel Puerto de Buenos Aires, Presencia del Futuro".
Editado por ABN-AMRO Bank.
1 comentario:
Hola:
Buenísima colección, muchas gracias.
Saludos.
Lombardi.
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